TOMAS HNOS:
Hugo Boetti, hoy nos toca decirte hasta pronto
Tu huella es imborrable en la vida de cada uno de nosotros.Y se fue un jueves para no molestar el fin de semana.
Difícil es escribir sobre alguien cuya vida habla por sí misma.
Hombre bueno como pocos, “Huguito" siempre estaba.
Referente que caminó las oficinas de Tomás desde adolescente y nunca más se fue.
Llegaba temprano a la oficina, se iba un rato al mediodía para compartir los almuerzos
con su amada Nora y sus hijos, y luego volvía siempre sonriente. Estos momentos
definieron su vida.
¿Qué pensaría mientras iba en su bici, rodando a su casa, sonrisa plena, saludando al
paso?, ¿Qué sueños lo alentaban?. Eso lo sabrá Nora, su compañera de siempre, sus
hijos y su familia.
Hugo fue y será siempre un valiente. Un ser que desafió los tiempos que vivimos
siendo él mismo, siempre, en todos los aspectos de su vida: fiel, ordenado, simple,
honrado, ¡boquense!
Cuando descubrió que era el tiempo de gozar con los que amaba, por alguna extraña
razón la vida no le dio chance.
Creemos que en todo hay un ¿para qué? Y aunque la respuesta no satisfaga a los que
quedan, su partida deja un impacto de reflexión, de buen amor, una referencia a
valores que parecen ya no existir. No era santo, era una buena persona y esto tiene
una luz propia, imborrable.
Que estés en Paz, y gracias a la vida que nos dio el lujo de compartir instantes con
vos.
Hugo, Huguis, Huguito… Tuvimos el honor de compartir con vos 45 años de
emociones. Hoy te despedimos con suma tristeza a tus 64 años.
¡Siempre te vamos a recordar y a admirar, Hugo!
Familia Tomás